Experiencias vividas de valor incalculable que te hacen soñar con un mundo diferente, que te desconectan de la realidad y hacen renacer en una utopía entrañable…transportándonos a lugares insospechados, jamás imaginados en lo cotidiano, creyendo en una verdad que nunca llegará….
Pero al verse envuelta en la magia del momento, se disfruta hasta el último instante regalado por la experiencia transformada en felicidad carnal, espiritual y del alma…un alma tan ansiosa de atención, comprensión, amor verdadero….
Y al verse embriagada de ese instante renovador, no le importa aventurarse a mar abierto, retando a las tormentas venideras después del impulso que tuvo por ser “feliz”…..
Sabe que la fuerza que ese momento mágico provee, bien valdrá la pena arriesgarlo todo e inclinarse a viento de esperanza y supervivencia de lo que vendrá después….
Finalmente lo vivido se atesora en el lugar mas seguro e imposible de ser erradicado por nadie, el único espacio que es solo nuestro, “nuestra mente”….
Podrán venir e invadir espacios, arrebatarnos fortunas, bienes materiales, pero los recuerdos quedan salvaguardados en nuestra mente y de ahí nadie podrá arrancarlos….
Convirtiéndose en el alimento del día a día del alma, en la esperanza de labrar un camino que nos lleve o por lo menos nos acerque a lograr convertir esos instantes en realidades que perduren por siempre en hechos de verdadero amor….
Pero al verse envuelta en la magia del momento, se disfruta hasta el último instante regalado por la experiencia transformada en felicidad carnal, espiritual y del alma…un alma tan ansiosa de atención, comprensión, amor verdadero….
Y al verse embriagada de ese instante renovador, no le importa aventurarse a mar abierto, retando a las tormentas venideras después del impulso que tuvo por ser “feliz”…..
Sabe que la fuerza que ese momento mágico provee, bien valdrá la pena arriesgarlo todo e inclinarse a viento de esperanza y supervivencia de lo que vendrá después….
Finalmente lo vivido se atesora en el lugar mas seguro e imposible de ser erradicado por nadie, el único espacio que es solo nuestro, “nuestra mente”….
Podrán venir e invadir espacios, arrebatarnos fortunas, bienes materiales, pero los recuerdos quedan salvaguardados en nuestra mente y de ahí nadie podrá arrancarlos….
Convirtiéndose en el alimento del día a día del alma, en la esperanza de labrar un camino que nos lleve o por lo menos nos acerque a lograr convertir esos instantes en realidades que perduren por siempre en hechos de verdadero amor….